Niebla vuelve a ser con Tosantos la capital de la zona del Condado
La localidad iliplense atraviesa el ecuador de Tosantos. Una cita en la que convergen y coexiste la Real Feria de Ganado; la Medieval; la de Muestras, denominada Expo-Niebla; y la tradicional, más conocida popularmente como de los Peros; las cuales devuelven a la mítica ciudad su condición de capital neurálgica del Condado.
Unos fastos que tendrán su broche final el 1 de noviembre. El hecho de que la festividad de todos los santos caiga en martes ha permitido ganar un día al calendario, extendiendo así la programación durante cuatro días en los que la localidad se sumerge en el Medievo. A pesar de que este tipo de ferias han comenzado a extenderse y proliferar como setas por toda la geografía provincial, la de Niebla sigue siendo la referencia por su patrimonio arquitectónico y unas murallas almohades que hacen de telón de fondo de la Ronda de Jerusalén, que viste sus mejores galas a la hora de recrear esta época. Algo a lo que contribuyen los mercados artesanales y una programación con pasacalles, músicos, talleres de pintacaras y un universo escénico con el objetivo de trasladar al visitante a la época en la que la antigua Ilipla era el corazón de la comarca.
En cuanto a la Feria de Muestras y a pesar de la crisis económica, las empresas han respondido a una de las citas más consolidadas del calendario, gracias a la garantía que ofrece el saber que por el recinto desfilarán más de 50.000 personas. No obstante, las prioridades de las empresas han virado. Si hace sólo un lustro el principal valor era dar a conocer una marca u empresa, con el propósito de hacer futuros clientes y fomentar las posibilidades de negocio con el largo plazo como horizonte, ahora la mayor parte de las empresas persiguen un objetivo básico: cerrar ventas.
No es por ello de extrañar que el número de expositores de venta directa haya aumentado significativamente, con preponderancia de productos de alimentación que se suman a artesanos y restauradores.
Pareja lectura puede hacerse de la cita ganadera, pues las dificultades que atraviesa el sector no han mermado la presencia de equinos, según constatan fuentes municipales. Los profesionales tratan de levantar el optimismo y confían en que el número de tratos tengan un leve repunte con respecto a los de la edición pasada, que ya fueron realmente bajos. De igual modo se espera animar las ventas con precios muy interesantes, dado que tanto ganaderías como particulares tratan de darle salida a las cabezas de ganado. La razón se debe a que hasta ahora las romerías en la provincia han tocado a su fin y, por tanto, la oportunidad de sacarles réditos alquilándolas.
Este año la programación oficial se verá enriquecida con las actividades del Castillo de los Guzmanes, que se suma así a las actividades de la programación oficial. Gracias a ello se recupera la primigenia esencia de la Feria Medieval, en un enclave único y cargado de historia que te traslada inmediatamente a la Edad Media. En paralelo, la fortaleza acogerá en su Patio de Armas una densa programación donde destaca los espectáculos de cetrería, tiro con arco, un campamento medieval y espectáculos nocturnos. De igual modo desde este emblema arquitectónico partirá un tren turístico que recorrerá los principales monumentos de la histórica ciudad, trasladando a los visitantes por los distintos puntos de la feria, las murallas almohades y el curso del río Tinto.
